Si hay una proteína animal cuyo sabor me encanta es: el cordero. No sé porqué me encanta el sabor salvaje que tiene el cordero – como de cacería – lo que en inglés se llama “gamey flavour”. Y no es que como mucho cordero: tipo 1 vez al mes pero lo disfruto muchísimo.
Lo bueno es que ahora se consigue buen cordero local en Panamá – lo malo es que el cordero sí tiene un carbón footprint bastante pesado aunque no viaje tanto. Por la parte nutritiva: amo amo la grasita que me aporta en cordero (mucho omega 3) además del selenio, zinc y vitaminas.
Si te gusta el sabor a cordero, estos meatballs te van a encantar: tienen especias que hacen brillar el sabor gamey y dátiles porque el cordero combina deli con el dulce. Como me fui en el trip medio oriente, decidí hacerlo con tabbouleh.
PERO este tabbouleh es con millo en vez de bulgur asique es gluten free y súper mega nutritivo. Es muy refrescante y ligero por el limón, las hierbas y el pepino pero te deja satisfecha por un buen rato.
Full puedes hacerlo solito sin las bolitas de cordero y si comes lácteos: queso feta le queda TOP. Esta receta es la última de la serie del millo y es la más fácil de todas!
Ingredientes:
Bolitas (meatballs)
1 libra de carne molida de cordero
½ taza de cebolla picada en cubitos o rallada
2 dientes de ajo picados muy finito
1 huevo
2 cds de harina de almendras
3 a 4 dátiles (depende de qué tanto dulce quieras)
2 cds de perejil picado muy finito
½ cdta de semillas de fennel (tostadas y machacadas)
¾ cdta de paprika ahumada
1 cdta de comino en polvo
¾ a 1 cdta de sal kosher
1 cda de aceite de aguacate
Tabbouleh
½ taza de millo
1 taza de agua
¼ cdta de sal kosher
1 taza de pepino en cubitos minis
½ taza de tomates cherry o perita en cubitos
¼ taza cilantro picado muy finito
¼ taza de pistachos picado muy finito
¼ taza de aceite de oliva
Jugo de medio limón amarillo (aprox. 1 cda de zumo)
Procedimiento bolitas:
En un bowl mediano, veirte todos los ingredientes de las bolitas de carne excepto el aceite de aguacate.
Mezcla bien la mezcla – preferiblemente con las manos.
OJO: los pedacitos de dátiles suelen pegarse asique asegúrate de esparcirlos bien y por partes para evitar que queden todos en el mismo lugar.
Crea bolitas: a mi me gustan pequeñas pero las puedes hacer del tamaño que te guste.
En un sartén, agrega el aceite de aguacate y cuando esté caliente, agrega las bolitas.
El fuego debe estar medio alto para poder sellar bien las bolitas.
Cuando termines de colocar las bolitas en el sartén, empieza dándole la vuelta a la primera que pusiste y sigue en el mismo orden. Debes hacerlo aprox. 4 veces por bolita.
Baja el fuego, pon una tapa y deja unos 2 minutos para que se terminen de cocinar por dentro.
Apaga el fuego y déjalas reposar un poquito antes de servirlas.
Tabbouleh:
Lava el millo unas 2 veces.
Vierte el millo en una olla pequeña y tuéstalo con 1 cdta de aceite de aguacate u oliva a fuego medio.
Revuelve constantemente hasta que esté dorado y agrega la sal + 1 taza de agua.
OJO: Cuidado con tu cara cuando viertas en el agua porque te puede salpicar o el vapor te puede quemar.
Baja el fuego un poquito y deja que el millo se cocine hasta que absorba todo el agua.
Apaga el fuego y tapa la olla. Permite que su propio vapor lo termine de cocinar.
Por mientras, pica el cilantro, pepino y tomate.
Con un tenedor, revuelve cuidadosamente el millo.
Cuando el millo esté a temperatura ambiente, mézclalo con los vegetales y cilantro, agrega sal y pimienta al gusto, el aceite de oliva y zumo de limón.
Dejalo reposar unos minutos para que el millo absorba los sabores.
Servir:
Si vas a servir todo junto, puedes hacerlo en una bandeja o plato plan grande. Colocas el tabbouleh abajo y las bolitas encima. Termina con cilantro y si quieres: pistachos picados y dátiles en pedacitos.